Busca la Iglesia Católica evitar injusticias

Aguascalientes, Julio 14 (2014).- Los cobros totalmente diferentes que hay en la Iglesia Católica deberán ser regulados para evitar que la religión sea señalada como injusta en los cobros que realiza por los servicios que presta, adelantó el vocero del III Sínodo Diocesano, Juan Carlos Tostado Montes, al aceptar que la percepción hoy día de los fieles, es que los costos son injustos ya que la diferencia entre templos es completamente abismal.

Tiene que haber criterios de medición, equidad, que no haya elementos que levanten sospechas, que tengamos elementos del por qué en algunos se cobra una cantidad y en otros, otra cifra que para algunos es injusto. Tenemos que aclarar lo que incluye el servicio,  apegarse a la norma de la economía diocesana en relación a estos cobros que se hacen, manifestó el religioso en rueda de prensa.

Dijo que es necesario renovar las normativas, actualizar procedimientos más periódicamente, y es que aceptó que hoy día los sacerdotes regularmente reciben mucho más de los cincuenta pesos que establece la norma interna, se tiene que cobrar por una misa, aunado a que además, hay donativos que perciben las cuales no son sujetos a revisión ni fiscalización, de ahí la necesidad de esta revisión solicitada en el Sínodo recientemente concluido.

“Eso es lo que queremos cuidar, no queremos uniformidad pero tampoco injusticia; exageraciones, que los cobros sean acorde a lo que se ofrece y a las posibilidades de la población, la simonía es lucrar con los bienes espirituales y eso no debe pasar en ningún lado, tiene que haber más equilibrio, aunque luego hay quienes dicen no tener para pagar la misa pero sí para el salón, la música”, recriminó.

Adelantó que ahora habrá apoyo de profesionistas para asesorar en el tema de la organización económica y es que señaló que los sacerdotes no son los más especialistas en el tema de recurso económico y la buena aplicación de los mismos, ahora se buscará que contadores lleven las cuentas de los templos de tal manera que el dinero producto de las limosnas por lo menos tenga un destino final, sin que pase por la desconfianza de los laicos.

Sobre el estudio que hizo la Universidad Autónoma de Aguascalientes mediante el cual detectó que es cada vez más el ausentismo de las personas a las iglesias, el sacerdote explicó que la religiosidad popular no se le puede tener menor estima, pero hay que unificarla “si no hay formación la piedad popular se nos convierte en superstición, eso es lo que hay que cuidar, a nosotros siempre nos ha interesado este tema”, afirmó.

Estamos sufriendo las consecuencias del secularismo actual, mucha gente prefiere quedarse escondida en su forma personal de vivir en la fe, no acercarse a los templos; es un fenómeno que amerita un estudio y estamos en eso, hay ya encuentros internacionales sobre el problema que están siendo abordados con absoluta seriedad, abundó el declarante.

Se ha mantenido la tradición católica en nuestro caso, pero no es fácil comprometerse bien, encontraos resistencia natural a la hora de decir somos católicos pero a la hora de dar testimonio no es lo mismo, la Iglesia Católica está muy interesada en el tema, hay muchos bautizados pero pocos discípulos en nuestro caso, hay que pensar las causas y ver que nos toca hacer, concluyó.